Un destino que espera con prístinas playas de arena blanca, un castillo de más de ocho siglos de antigüedad y un escenario idílico para practicar windsurf y kitesurf a metros de una ciudad gaditana.
A 105 kilómetros de la ciudad de Cádiz, en la comunidad autónoma de Andalucía, España, se encuentra el municipio de Tarifa, una urbe costera que se sitúa a una altitud de 7 metros sobre el nivel del mar. Es el punto más meridional de Europa y más cercano al continente africano.
Cuenta en su haber con numerosos restos prehistóricos de gran interés cultural, tal como las pinturas naturalistas de la Cueva del Moro y la necrópolis de los Algarbes, algo que se suma a los vestigios fenicios de la Isla de las Palomas y los restos de la época romana, incluso con la valiosa ciudad de Baelo Claudia, el hallazgo arqueológico más valioso de toda la provincia.
Al-Yazirat Tarif, como la llamaban los musulmanes, ha sido históricamente un punto estratégico en la zona fronteriza frente a incursiones piratas como así también un enclave militar frente a las posesiones inglesas de Gibraltar.
De sus murallas, que datan de entre los siglos X y XVI, se pueden observar dos tramos diferenciados: uno de la época islámica que rodeaba un recinto más pequeño, y otro que abarca a todo el antiguo casco urbano. En este último se encuentra la iglesia Mayor de San Mateo, San Francisco y la de Santa María.