Fueron diseñados bajo el mandato de María de Médicis en 1612 y, en la actualidad, se tratan de los jardines más bellos, céntricos y visitados de París. Su belleza no solo atrae a locales, que deciden pasar sus días allí, sino también a miles de turistas extranjeros que lo visitan por año para disfrutar de un descanso y de majestuosas vistas.
Apodado “Luco”, el Jardín de Luxemburgo (en la práctica, jardines), es un enorme espacio que constituye un parque público de París, Francia, de 22 hectáreas. Oficialmente, es también el jardín del Senado francés.
Se trata de un parque privado abierto al público cuyo diseño actual corresponde, en su mayor medida, a las obras construidas por el arquitecto Jean-François-Thérèse durante el Primer Imperio Francés.
Se sitúan en el Barrio Latino y conforman una de las zonas verdes más populares y bellas de París. Los caminos del jardín se distribuyen simétricamente alrededor de un estanque octogonal situado en el centro, al frente del palacio en el que supo vivir María Médicis, viuda de Enrique IV.
Fue construido entre 1615 y 1617 por encargo de María, quien estaba “cansada” del Louvre y decidió edificar una residencia de estilo italiano que le recordara a su tierra natal.
Es el sitio ideal para disfrutar de un pícnic, leer, pasear, tomar aire fresco e incluso jugar al tenis, frisbee o hasta realizar cursos de arboricultura o apicultura. En fin, un ameno y bello espacio que también permite disfrutar de un teatro de títeres, jugar con calesitas para los más pequeños o hasta ingeniárselas para jugar con pequeños barquitos de vela en un estanque.